Gracias a
Els Petits Viatgers hemos vivido un gran momento, la visita a Papá Noél. Hemos disfrutado todos juntos de un maravilloso momento, una gran experiencia, todo empieza en el telecabina de Canillo para poder ir al Forn donde en una casita de madera, arriba de la montaña, en la estación de Esquí, muy bien decorada, donde nos esperaba una una buena merendola para esperar la llegada de Papá Noél, amenizada por los elfos y una hada.
De repente llegó Papá Noél, haciendo tocar una campanita. La cara de todos los niños que están en el lugar, no tiene precio. Todos corriendo a la ventana para verlo llegar, todo super mágico, ver llegar a Papá Noél con una campana en una mano y una luz tenue en la otra, como si de un cuento se tratara. Y poco a poco el hada va saliendo en la sala donde esperan los peques jugando y los va llamando familia por familia. Daric fue el tercero en entrar donde esperaba Papá Noél. ¡Qué cara de felicidad! Sorpresa, alegría, incredulidad, sus caras, ufff!!!!, se ponía la piel de gallina nada más de verlo.
Después de estar con Papá Noél, en un cuartito tranquilo, sentado en su regazo y explicándole lo que había escrito en su carta, Papá Noél le pregunta si hay alguna cosa que no haga muy bien. Cuando le explica que debe de esforzarse en aquello que no le sale, la cara sale de su sitio. Increíble....
Se trato de un momento muy mágico que durante días ha estado recordando con cariño. Una experiencia más para explicar. Una experiencia mágica para hacer con un peque de cuatro añitos.
Gracias a los que hacéis estas experiencia posibles porque convierten estas fiestas en algo mágico y una gran experiencia.
Gracias a Els Petits Viatgers hemos vivido un gran momento, la visita a Papá Noél. Hemos disfrutado todos juntos de un maravilloso momento, una gran experiencia, todo empieza en el telecabina de Canillo para poder ir al Forn donde en una casita de madera, arriba de la montaña, en la estación de Esquí, muy bien decorada, donde nos esperaba una una buena merendola para esperar la llegada de Papá Noél, amenizada por los elfos y una hada. 
De repente llegó Papá Noél, haciendo tocar una campanita. La cara de todos los niños que están en el lugar, no tiene precio. Todos corriendo a la ventana para verlo llegar, todo super mágico, ver llegar a Papá Noél con una campana en una mano y una luz tenue en la otra, como si de un cuento se tratara. Y poco a poco el hada va saliendo en la sala donde esperan los peques jugando y los va llamando familia por familia. Daric fue el tercero en entrar donde esperaba Papá Noél. ¡Qué cara de felicidad! Sorpresa, alegría, incredulidad, sus caras, ufff!!!!, se ponía la piel de gallina nada más de verlo. 
Después de estar con Papá Noél, en un cuartito tranquilo, sentado en su regazo y explicándole lo que había escrito en su carta, Papá Noél le pregunta si hay alguna cosa que no haga muy bien. Cuando le explica que debe de esforzarse en aquello que no le sale, la cara sale de su sitio. Increíble.... 
Se trato de un momento muy mágico que durante días ha estado recordando con cariño. Una experiencia más para explicar. Una experiencia mágica para hacer con un peque de cuatro añitos.
Gracias a los que hacéis estas experiencia posibles porque convierten estas fiestas en algo mágico y una gran experiencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por participar en esta página.